Cuando se trata de infancia, cada síntoma merece ser mirado con delicadeza, sin alarmas, pero con atención. El parpadeo excesivo en un niño de 10 años, aunque pueda parecer preocupante al principio, muchas veces es solo una forma que tiene su sistema nervioso de expresarse o autorregularse.

Veamos qué puede estar detrás de este tic y cómo acompañarlo de forma suave, respetuosa y efectiva.

• Tensión emocional o nerviosa acumulada
• Una forma de descarga neuromotora inocente (común en la infancia)
• Posible relación con fatiga visual o estrés escolar
• Y en algunos casos, hipersensibilidad sensorial o ansiedad oculta

Parche recomendado:

✅ PEACE – Es la mejor opción para regular el sistema nervioso autónomo

Actúa sobre el estrés inconsciente y la necesidad de liberar tensión mediante tics

Ayuda a que el cuerpo “desactive” el patrón repetitivo de forma suave

Muy bien tolerado en niños, especialmente en casos como este

Pauta recomendada:

1 parche PEACE al día

Usar entre 6 y 12 horas (no necesariamente todo el día al principio)

Comenzar con 6 h durante 3 días y observar

Si responde bien, puede aumentar a 12–14 h

Mantener durante al menos 3 semanas, luego valorar evolución

Observaciones importantes:

• No forzar al niño a dejar de parpadear: eso aumenta la ansiedad y el tic
• Evitar pantallas excesivas o luces brillantes
• Acompañarlo con actividades calmantes: pintura, naturaleza, juego tranquilo

Si el tic se agrava o aparecen otros síntomas neurológicos, consultar con pediatra o neurólogo